Medita como Jacobo Grinberg
El científico mexicano que cambió el entendimiento de la conciencia.
La historia de Jacobo Grinberg es interesante en muchos aspectos. Fue un científico mexicano que dedicó gran parte de su vida a investigar el chamanismo, la parapsicología, la meditación y la telepatía.
Como podrás imaginar, fue criticado por la comunidad científica, porque se dedicó a estudiar aquello que se considera charlatanería. Pero Jacobo era una persona muy bien estudiada: obtuvo su licenciatura en psicología por la UNAM, estudió Psicofisiología en Brain Research Institute donde eventualmente obtuvo un doctorado.
El trabajo de Jacobo era intentar comprender la conciencia mediante el método científico, y lo hizo a través del estudio de todo aquello que se consideraba esotérico. Escribió 54 libros sobre la brujería, el chamanismo, la telepatía, la meditación, y quizá su obra más famosa, sobre la teoría sintérgica.
Lo más sorprendente no es que Jacobo pasó mucho tiempo estudiando a Pachita, una curandera que era poseída por el emperador azteca Cuauhtémoc para realizar “cirugías psíquicas”; sino la manera en que, repentinamente, desapareció en 1994. Desde entonces no se sabe nada de él.

Hay muchas teorías conspiranoicas, por supuesto. Algunos dicen que logró un nivel alto de conciencia y fue capaz de avanzar a otra dimensión. Otros dicen que la CIA lo tiene trabajando a marchas forzadas en el Área 51 o algo similar. En fin, todo eso es debatible, pero muchas personas consideran que Jacobo era un experto en la conciencia.
Así que hoy quiero compartirte una guía práctica para meditar como Jacobo Grinberg, una guía que él, personalmente, comparte en este video.
Practícala y me cuentas cómo te va.
Guía Práctica de Meditación: Un Viaje de Observación y Unidad
Fase 1: Anclarse en la Respiración
Siéntate o recuéstate: Encuentra una postura cómoda que te permita mantenerte alerta y relajado.
Cierra los ojos: Dirige tu atención hacia adentro.
Observa tu respiración: Concéntrate en el flujo natural de tu respiración: la inhalación y la exhalación. No intentes modificarla, solo sé consciente de ella.
Acepta los pensamientos: Es natural que surjan pensamientos y sensaciones. No los reprimas ni luches contra ellos. Simplemente, obsérvalos con aceptación mientras surgen y se desvanecen, como olas en el océano.
Regresa a la respiración: Cada vez que te distraigas, regresa suavemente tu atención a la respiración.
Fase 2: Expandiendo la Atención al Cuerpo
Siente tu cuerpo: Una vez que logres cierta estabilidad con la respiración, dirige tu atención a las sensaciones físicas de tu cuerpo.
Recorre tu cuerpo: Comienza por la parte superior de tu cabeza y ve descendiendo gradualmente, sintiendo cada parte: el cuero cabelludo, la frente, los ojos, la nariz, la boca, etc.
Acepta sin juzgar: Simplemente, observa las sensaciones, sin analizarlas ni juzgarlas. Permite que tu cuerpo esté presente en tu conciencia.
Unifica la percepción: A medida que te familiarizas con las diferentes sensaciones, intenta percibir tu cuerpo como una unidad, un todo interconectado.
Fase 3: Integrando Pensamientos, Emociones e Imágenes
Observa tus pensamientos: Incorpora la observación de tus pensamientos a la práctica. Sé testigo de ellos sin involucrarte en su contenido. Observa cómo se forman y se disuelven.
Incluye las emociones: Amplía tu atención a tus emociones. Reconoce las diferentes tonalidades y matices que las componen. Acepta su presencia sin juzgarlas.
Percibe las imágenes internas: Observa las imágenes que surgen en tu mente. Puede tratarse de recuerdos, fantasías o imágenes abstractas. Acógelas con la misma actitud de aceptación.
Mantén la observación simultánea: Intenta mantener una consciencia simultánea de tu respiración, cuerpo, pensamientos, emociones e imágenes internas.
Fase 4: Abriéndose al Entorno
Integra los sonidos: Incorpora a tu consciencia los sonidos que te rodean. Percíbelos con atención, sin dejar que te distraigan.
Incluye la visión: Si estás con los ojos cerrados, puedes comenzar a abrirlos gradualmente, incorporando la información visual a tu campo de atención.
Mantén la atención expandida: El objetivo es llegar a observar de manera simultánea todos los elementos de tu experiencia: internos y externos.
La culminación: Conexión Profunda y Unidad
Al lograr esta observación global y simultánea, cruzarás un umbral donde las concepciones limitantes del "yo" se disuelven. Experimentarás una profunda conexión contigo mismo, una presencia plena y unificada que te conecta con la totalidad del Ser.
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